XED! – Monumento Natural Puente Del Inca desde Uspallata, Provincia De Mendoza, Argentina.

¡Pasó! Hoy después de largos meses abrimos las entradas en una nueva provincia argentina. Estos últimos meses nos han visto profundizando sobre destinos que ya hemos desarrollado. Hoy hablamos por primera vez de Mendoza, la tierra del sol y del buen vino que nos recibió en su capital a fines de Abril y principios de Mayo. Para abrir este nuevo ciclo que mejor que sumergirnos en la mística de un atractivo único.

Es que ensombreciendo el ardiente Río Cuevas un arco de roca forma un puente natural a casi veinte metros del cauce y enclavado en las profundidades de un valle intermontano con cumbres circundantes de casi cinco mil metros sobre el nivel del mar. Si esto querido lector no le parece algo sorprendente, menos aún podrá creer las historias cargadas de leyendas y tragedias que de boca en boca llegaron hasta nuestros días. Entonces… empezamos a lo grande hablando sobre el Monumento Natural Puente Del Inca.


¿QUÉ ES?

Un arco suspendido natural de roca que atraviesa a casi veinte metros de altura el Río Cuevas, considerado un verdadero sistema geobiológico. De un ancho de casi treinta metros, posee tonalidades ocres y verdosas producto de la acción de las aguas termales que surgen de una fuente in situ. De gran importancia para los Incas, parte de la Red Vial Qhapaq Ñan. Sitio de leyendas, mitos y la famosa tragedia del Hotel Termal De Puente Del Inca.

Bienvenida a Monumento Natural Puente Del Inca.

¿CÓMO LLEGAR?

Si partimos desde Uspallata como cabecera comenzaremos de la intersección de la Ruta Nacional N. ° 7 y provinciales N. ° 13 y 52. Desde aquel punto, el cual reconoceremos por el Paseo Artesanal o el Centro Cultural Uspallata, seguiremos hacia el oeste por la Ruta Nacional N. ° 7 con destino hacia la vecina República De Chile. El camino se realiza íntegramente por esta ruta cruzando el Río Uspallata, Polvaredas, Punta De Vacas y Los Penitentes. Luego de setenta kilómetros asfaltados entre montaña llegaremos a Puente Del Inca. Debemos tener en cuenta que prácticamente no hay servicios en ruta.

Sobre las oportunidades para llegar en transporte público podemos decir que el ómnibus de media y larga distancia es la opción que permite la llegada. La empresa Andesmar realiza servicios diarios entre ambas localidades llegando a tener hasta tres frecuencias por día. Desconocemos si otras empresas realizan el recorrido y sugerimos tomar tours regulares para conocerlo.

Desde la Ciudad De Mendoza partiremos desde la Plaza Independencia por trescientos metros hacia el sur llegando a la Calle San Lorenzo, la cual hacia el este nos dejará seiscientos metros separados de la Avenida José Vicente Zapata. En metros, la avenida se convertirá en el Acceso Este el cual empalmaremos por el Acceso Sur. Siguiendo este tramo coincidente con la Ruta Nacional N. ° 40 llegaremos hasta el cruce con la Ruta Nacional N. ° 7, la cual tomaremos al oeste llegando hasta Uspallata y siguiendo como lo hemos visto.

Son casi ciento noventa kilómetros desde la capital totalmente asfaltados y en camino de montaña. El transporte predilecto también es el ómnibus (como en el punto anterior) y brinda algunas opciones más en comparación a las salidas desde Uspallata.


RECORRIDO

¡Qué difícil! Nunca es fácil comenzar a escribir sobre una nueva provincia, aún menos hacerlo para referirse en escasos diez párrafos a uno de los sitios más particulares de nuestro país. Ya el mismo nombre genera una atmósfera propicia de cualquier película de acción. Hablar de Puente Del Inca es referirse a un sitio que hasta en los tours regulares (comerciados generalmente bajo el nombre de “Alta Montaña”) le roba el protagonismo a atractivos como el Dique Potrerillos, la Ciudad De Uspallata, la fronteriza localidad de Las Cuevas o hasta el sobresaliente Aconcagua.

Un poco del paisaje que disfrutamos aquel día…

En ese tour nos encontrábamos camino a vernos cara a cara después de varios años con el puente. Llegamos encajonados entre el valle que formará el Río Mendoza, aturdidos por el camino que empieza a subir y el frío que contrasta con el clima templado que había en la capital cuando partimos. Al arribar al puente el minibús estaciona sobre la banquina a la izquierda. Las casillas de venta de recuerdos siguen intactas y, entre indicaciones de nuestra guía, nos notifican la hora de regreso al vehículo. Llega el tiempo de bajar y caminar para encontrarnos a escasos metros con el puente.

Puestos de venta de artesanías en Puente Del Inca.

Asomándonos a la barandilla de madera aparece increíble como siempre el Monumento Natural Puente Del Inca. Con las dimensiones ya nombradas en la introducción, el brazo de roca une las dos costas sobre el Río Cuevas que corre corriente abajo humeante por las aguas termales. Es que debajo del puente aún persisten las ruinas de lo que fueron los baños termales del Hotel Termal De Puente Del Inca, la joya mendocina de los grandes hoteles de lujo argentinos que supo tener su fin aquella fatídica tarde del quince de Agosto de 1965.


Ese quince de Agosto de 1965 la preocupación pasaba por las intensas nevadas que azotaban la región en las últimas semanas. Si bien nadie imaginaba lo que podía pasar la población en general era consiente de la gran cantidad de nieve que se estaba acumulando a las laderas del Cerro Banderita Sur y el Cerro Banderita Norte linderos al hotel. A las 14:00 Hs. pasaría la catástrofe…

Un alud de dimensiones considerables se deslizo desde la ladera del Cerro Banderita Sur, sepultando el cuerpo principal del entonces Hotel Termal De Puente Del Inca bajo siete metros de nieve. Según lo que pudimos investigar hubo solamente una víctima fatal, aunque el hotel fue totalmente destruido e inutilizado desde ese momento en adelante. La Capilla Nuestra Señora De Las Nieves solo sufrió daños menores, solamente perdiendo su cruz y la explosión de algunos de sus vitrales.

Esa misma noche cerca de las 22:00 Hs. habría otro alud en Las Cuevas, localidad vecina de frontera unos quince kilómetros hacia el oeste. El terrible saldo de dicho evento fue de más de cuarenta fallecidos, la mayoría de ellos operarios del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico a la vera del Cerro Santa Elena. Hasta el día de hoy sigue siendo una de las mayores tragedias de su tipo en el país.


Más allá de los baños hoy derruidos, el flujo constante de agua termal sigue vertiendo al Río Cuevas de manera constante. El agua constantemente produce su acción termo mineral, la cual genera (en una forma la cual sólo aquí vimos a las claras) depósitos de travertino en las calcificadas paredes que dan al río. Ya de por sí ver el agua a grandes temperaturas mientras humea al mezclarse con las gélidas aguas que bajan de la cordillera es un espectáculo en sí mismo. De fondo, las ruinas de lo que fuera el Hotel Termal se divisan vagamente, siendo distinguible con claridad la Capilla Nuestra Señora De Las Nieves, única sobreviviente intacta del alud.

Ruinas del Hotel Termal y Capilla Nuestra Señora De Las Nieves al fondo.

En otros tiempos era posible cruzar el cauce del río y conocer la ribera opuesta. A día de hoy, en parte por el estado de la estructura como también por el riesgo que supone la actividad turística a un monumento natural, el paso se encuentra restringido solo para personal autorizado. En el lugar tenemos el mirador y su coqueto cartel en madera de rigor que indica el sitio y se presta a fotografías. A nuestras espaldas la pequeña villa de Puente Del Inca. Antes subimos un pequeño desnivel que delimita ambos sectores dentro del lugar (el mirador y la población) para mirar otra vez el puente.

Puente Del Inca desde el desnivel.

Desde la altura no solamente se ve el monumento natural, sino que también podemos divisar todo el valle que sube hacia el oeste. Hay una plaza improvisada sobre derruidos rieles que recuerdan el pasado del paraje. Es que en algún momento podríamos haber llegado desde Buenos Aires hasta Puente Del Inca sin escalas en tren, partiendo desde el Barrio De Retiro y llegando a la frontera con la hermana República De Chile. Los hangares ferroviarios abandonados o reutilizados a nuestras espaldas también nos cuentan un poco de esta historia…


El famoso BAP” nace en 1882 a base de capitales ingleses por acción del empresario chileno Juan E. Clark, quien ideo a base de otros ferrocarriles preexistentes la posibilidad de conectar ambas costas sudamericanas mediante vías férreas, uniendo dos de las capitales mas pujantes del continente. Recién en 1910 la línea pudo conectar efectivamente ambos países, uniendo el cruce entre la localidad mendocina de Las Cuevas y su vecina chilena Los Andes.

Posterior a su nacionalización, ya en 1947, la línea sería absorbida por el actual Ferrocarril Nacional General San Martín. Durante algunos años más el servicio se brindó con cierta normalidad, más todos sabemos lo que ha sufrido el ferrocarril en la República Argentina posterior a estas décadas…

El BAP jugó un rol fundamental en el desarrollo de la industria vitivinícola de la provincia, siendo una de sus bodegas más reconocidas (Bodegas Norton) íntimamente ligada al ferrocarril. En Buenos Aires las Galerías Pacífico obraron como casa central de la empresa, dándole su nombre actual.


Sobre la vía hoy crecen algunos arbustos que aguantan el viento como pueden. Los hangares ferroviarios hoy son cafeterías u hosterías que se reutilizan en las más diversas formas. También parte de aquella playa ferroviaria hoy la ocupan los puestos de artesanías de los que venimos hablando. Nos dirigimos hacia allí de a poco inspeccionando visualmente los edificios derruidos y aprovechando el paisaje para la fotografía. También vemos el cartel que habla sobre la leyenda y la importancia histórica del lugar.

Restos del paso del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico.

Según la historia una de las princesas incas que portaba este dote sufrió una terrible enfermedad que no encontraba cura. Ante el desconcierto de los curanderos, un vasallo sugiere que para sanar lo que la aquejaba debía dirigirse hacia el sur, en donde debía pasar varios días bañándose en unas míticas aguas termales. Una comitiva de los mejores hombre fueron dispuestos por el emperador, quienes llevaron a la princesa al lugar y milagrosamente sano su mal. Al regresar… un aluvión impedía el cruce por el Río Cuevas por lo cual los guardias entrelazaron sus cuerpos para crear un puente que permitiera el cruce. Al regresar la mirada, estos custodios se habían petrificado y formado el Puente Del Inca.

Volviendo a la realidad… ahora caminamos entre puestos de artesanías. Piedras, ponchos, souvenirs, vasijas y todo un tendal de recuerdos. Recordamos que antiguamente todo tipo de objeto calcificado era comerciado, lo que posterior al cierre del paso peatonal del puente dejó de ser posible en pról. de la conservación del monumento natural. Con los recuerdos de tíos y abuelos que visitaron el lugar años antes que nosotros, el horario nos saca del sueño y volvemos al minibús para seguir en dirección a la frontera, quedan pocos kilómetros a Las Cuevas y su Cristo Redentor De Los Andes.

Puestos de artesanías y vías férreas en desuso.

Nos vamos sabiendo que hemos visto uno de los grandes símbolos provinciales y hasta nacionales. Un atractivo que nuclea naturaleza, historia y misticismo en solo algunos metros. El Puente Del Inca ha sido ese ícono exótico que supo relajar bajo su sombra y sus aguas a las personalidades más resonantes de la historia nacional. Toda esa característica glamorosa se anexa al milenario escenario natural de una bucólica belleza, inigualable para algunos. Un placer haberlo visitado nuevamente.


A TENER EN CUENTA…

  • El acceso al mirador es, casi de forma obvia, libre y gratuito. Como comentamos durante toda la entrada, se encuentra restringido el acceso a la otra orilla del Río Cuevas y los restos del Hotel Termal.
  • También se encuentra restringido el acceso a la fuente de aguas termales. Hasta donde pudimos averiguar no existe forma de usufructuar las aguas a día de hoy.
  • Los servicios en la localidad son bastante restringidos. Si bien es un punto importante camino a Santiago De Chile desde Mendoza, no cuenta con estación de servicio ni muchas posibilidades comerciales. Sin embargo, los comercios que existen (almacenes, kioscos, cafeterías y alojamientos) cumplen con lo que Puente Del Inca necesita.
  • Para llegar al mirador no hay que caminar demasiado, aunque no encontramos señales de accesibilidad en el lugar. No es un atractivo accesible pero intuimos que con ciertas prácticas podría serlo fácilmente.
  • La recomendación para llegar hasta el lugar desde la Ciudad De Mendoza es mediante un tour. Las excursiones comercializadas bajo el nombre de “Alta Montaña” incluyen una parada de algunos minutos en el lugar, suficiente para conocerlo y escuchar las palabras de su guía sobre la historia local.
  • En caso de no visitar el sitio con un guía, la cartelería del lugar cuenta de forma excelente la historia del Monumento Natural Puente Del Inca.
Origen geológico de Puente Del Inca en idioma español e inglés.
  • Los sanitarios disponibles están en los comercios de la localidad. Suele ser necesario consumir para su uso, más la pregunta por utilizarlos nunca esta de más.
  • Para estacionar… la banquina se presta al costado de la Ruta Nacional N. ° 7 e improvisa una playa de estacionamiento. Transitar con cuidado debido al tráfico constante de la ruta, ligado al corredor comercial que conforma con la República De Chile.
  • Pareciera estar de más decirlo, pero rogamos no dejar residuos a nuestro paso. Lamentablemente, por la naturaleza de paso que tiene el paraje y la Ruta Nacional N. ° 7 en sí, sobre la banquina se juntan pilones de residuos dejados en gran parte por el transporte entre Argentina y Chile.
  • Rogamos también respetar cada una de las barandillas que dividen el lugar. Realmente el Puente Del Inca es una geoforma vulnerable a ciertos factores, por lo cual debemos evitar su paso por la seguridad del monumento natural.
  • Aprovechar el sitio para la fotografía es un menester. Probablemente el punto mas fotografiado de todo el tour.

Vamos terminando la primera entrada mendocina en este espacio, que mejor que comenzar a hablar de una de las provincias mas bonitas de nuestro país por uno de sus símbolos principales. En entregas venideras iremos conociendo algunos puntos mas que visitamos en nuestro viaje relámpago a la región cuyana. Nunca olvidaremos las agradables tardes otoñales sosegadas por la belleza cordillerana de Mendoza.

De la Cordillera De Los Andes al Mar Argentino sigue nuestro periplo del viernes que prosigue. Fuente inagotable de sitios increíbles es nuestra Costa Atlántica y el litoral de la Provincia De Buenos Aires. Será hasta el diez de Noviembre a las 20:30 Hs. para conocer…

Leemos sus comentarios y sugerencias, ¡Muchas gracias por leer!

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